viernes, 27 de julio de 2012

Lo que caperucita roja no sabía.




Alguien golpea la puerta.

- ¿Quién es?

- Abuelita, soy yo, tu nieta.

- Adelante, adelante.

La puerta se abre y entra en escena la niña por todo el mundo conocida como Caperucita Roja, llamada así por llevar siempre puesta una caperuza que absorbía todas las longitudes de onda de la luz excepto las que nosotros asociamos a dicho color.

- Nieta mía, ven y siéntate junto a mi cama.

La niña se sienta y mira a su supuesta abuela.

- Abuelita, ¡qué pabellones auriculares más grandes tienes!
- Para captar mejor las vibraciones sonoras que produces y redirigirlas hacia el interior de mi oído.

- Abuelita, ¡qué ojos más grandes tienes en relación a tu tamaño corporal!

- A más grandes son mayor es la agudeza visual, y así te veo mejor. Además, es curioso que me lo digas, porque existen estudios que indican que el tamaño relativo de los ojos en las distintas especies de mamíferos está correlacionado con la máxima velocidad que pueden alcanzar, lo cual también es lógico, porque aquellas que son capaces de correr grandes velocidades necesitan una mayor agudeza visual para poder esquivar obstáculos.

- ¡Y qué hocico más grande tienes!
- Pues mira, también tiene su explicación. Deberías saber primero que por cada julio de energía que usas para contraer los músculos, 3 julios se degradan a calor, de modo que al hacer un ejercicio físico interno, aumenta mucho la temperatura corporal, y en el caso de que aumente mucho la temperatura, se puede generar un golpe térmico.

- mmm- Caperucita flipa con la supuesta abuelita.

- Algunos mamíferos como los ungulados y los carnívoros, contamos con un sistema especial para enfriar la sangre que va al cerebro, y de este modo podemos hacer un mayor ejercicio físico sin que peligre nuestra vida por un golpe de calor. Concretamente, el truco consiste en que las arterias que van al cerebro atraviesan previamente, a contracorriente, un seno de sangre venosa fría, reduciendo así la temperatura de la sangre que va al cerebro.

- ¿Y de donde sale esa sangre venosa fría?

- La sangre venosa fría viene del hocico precisamente. El flujo de aire que entra por el hocico con la respiración, refresca las paredes de los conductos nasales, y con ello se enfría la sangre que irriga dichos conductos. Así que a mayor hocico, más sangre venosa se refresca durante la carrera.

- ¿Y para qué te sirve un sistema que prevenga a tu cerebro de un golpe térmico durante la carrera?

- ¡¡¡Para perseguirte mejor!!!





Bibliografía

Randall, D., Burggren, W y French, K. (2006). Eckert Animal Physiology. Mechanisms and Adaptations. 6ª Edition. W.H.Freeman and Company. N. York.

Amber N. Heard-Booth, E. Christopher Kirk. The Influence of Maximum Running Speed on Eye Size: A Test of Leuckart's Law in Mammals. The Anatomical Record: Advances in Integrative Anatomy and Evolutionary Biology, 2012; DOI: 10.1002/ar.22480

domingo, 22 de julio de 2012

Aseándome con un... esqueleto.


Desde tiempos inmemoriales las esponjas marinas han sido utilizadas por el hombre para el aseo personal, entre otras utilidades, siendo aún utilizadas, sobre todo, para el aseo de los bebes debido a que son muy suaves que permiten respetar su piel sensible.

Pero ¿qué son las esponjas marinas?

Las esponjas marinas, por el contrario de lo que mucha gente piensa, no son plantas, sino un grupo de animales sésiles, es decir, que crecen adheridos al sustrato, del que no se separan.

Este grupo de animales se llama Poríferos, nombre que recibe debido a que su cuerpo, una masa de células englobadas en una matriz gelatinosa y sostenida por un esqueleto de colágeno y de diminutas espículas, está lleno de poros diminutos. Unos poros y canales que recorren el animal constituyendo un sistema por el que fluyen corrientes de agua para ser filtrada y así captar el alimento.

Los poros por los que entra el agua al animal son pequeños y muy numerosos, y se los conoce como ostiolos, y los poros por los que el agua sale, que son menos numerosos y más grandes, se los llama ósculos. Entre los ostiolos y los ósculos existen canales, y en ellos podemos encontrar unas células con flagelos llamadas coanocitos.

El coanocito es una célula similar a un espermatozoide, que se encuentra tapizando algunas paredes del animal uniendo sus “cabezas” y dejando el “rabito” hacia fuera, de modo que ese “rabo” que al menearse provoca el movimiento del espermatozoide, aquí, al estar fija la célula, lo que provoca son corrientes de agua a través de los canales internos del animal.

El coanocito, además, cuenta con una un collar de microvellosidades que rodea la base del flagelo, haciendo de red con la que estas células filtran el agua. Las partículas que son demasiado grandes como para atravesar esa red, son fagocitadas por el cuerpo celular del coanocito.

Podemos distinguir 3 niveles de organización distintos en los poríferos:

- Asconoides. Son los poríferos más simples, los canales parten de múltiples ostiolos, y llegan a una cavidad interna que está tapizada por los coanocitos, y de esta cavidad, el agua sale por un único ósculo.

- Siconoides. En ellas, el agua accede por los ostiolos a unos canales, y estos dan a otros canales tapizados por coanocitos, y de aquí a la cavidad central que esta vez no presenta coanocitos, y de aquí, el agua sale por el ósculo.

- Leuconoides. Las más complejas. El agua accede por los ostiolos a unos canales, de estos pasa a unas cámaras tapizadas por coanocitos, y de esta a otros canales que se reúnen hasta salir por el ósculo.

Todas las superficies que no están cubiertas por los coanocitos, quedan tapizadas por otro tipo célular, los pinacocitos, que hacen de epidermis. Algunos de estos se transforman en miocitos, unas células contráctiles situadas en torno a los ósculos, que al contraerse permiten regular la entrada de la corriente de agua.

Existen además otros tipos celulares, como los arqueocitos, que pueden fagocitar partículas, y transformarse en otros tipos celulares; esclerocitos, que producen espículas; espongocitos, que producen fibras de espongina del esqueleto; colenocitos y lofocitos, que forman fibras de colágeno.

Al carecer de órganos o de verdaderos tejidos, y a que sus células cuentan incluso con cierto grado de independencia, las esponjas tienen una gran capacidad autoregeneradora. Siendo capaces de reparar heridas, regenerar partes perdidas, e incluso formar una nueva esponja a partir de fragmentos de algún fragmento. Ya Aristóteles, en su obra Historia animalium, hablaba sobre la capacidad regeneradoras de estos seres.

El esqueleto de estos animales sostiene los sostiene evitando el cierre de los canales. Este esqueleto se compone de fibras elásticas de colágeno, y espículas que pueden ser:

- Espículas silíceas. Compuestas por sílice hidratado. Son características de dos clases de esponjas, las hexactinelidas y las demosponjas

- Espículas calcáreas. Compuestas por carbonato cálcico. Son características de la clase calcáreas.

La relación entre la cantidad de colágeno y de espículas en la esponja, hace que varíe mucho la dureza de su esqueleto, pudiendo encontrar especies de esponjas macizas, con un esqueleto muy duro, hasta otras especies con un esqueleto mucho más elásticos y suave al tacto, entre las que están las que el hombre utiliza comercialmente como esponjas de baño.

Fuentes:
Hickman, Roberts y Larson, 2001. Zoología, 10ª Edición. McGraw Hill
http://www.esponjasnks.com/

Actualización 20/02/13:
Otro tipo de esponjas naturales son las esponjas vegetales, conocelas en "Aseandome con una... fruta"

martes, 17 de julio de 2012

Cefalópodos, curiosos animales.



Recientemente, visitando las playas de Portugal, un submarinista me mostró la sepia que ilustra esta entrada antes de devolverla a la libertad. Me parecen tan curiosos los cefalópodos que no he podido evitar dedicarles una entrada.

Las sepias son cefalópodos, como los calamares, pulpos y nautilos, todos ellos con un pie modificado situado en la cabeza, y cuando digo pie no piense en un pie como el humano, me refiero al pie de un molusco, piense mejor en el pie de un caracol, que es otro molusco, y una vez que visualiza ese pie enróllelo a modo de embudo y se lo coloca en la cabeza al animal, eso viene a ser un cefalópodo.

La parte dorsal de la pared del cuerpo es el manto, que cuenta con una cavidad donde se presentan las vísceras del animal. Las células epidérmicas del manto segregan carbonato cálcico y conquiolina para formar la concha de estos animales, que en los nautiloideos es externa, en sepias y calamares es interna y reducida, y está ausente en pulpos.

Los movimientos musculares de la pared del manto fuerzan la entrada de agua a la cavidad paleal (cavidad del manto), agua de la que obtiene oxigeno a través de sus branquias, y que será expulsada con ese embudo antes mencionado, también conocido como sifón.

Exceptuando los pulpos, que están adaptados a reptar haciendo uso de las ventosas de sus brazos, el principal medio de desplazamiento de los cefalópodos consiste en la propulsión a chorro que consiguen expulsando agua de la cavidad del manto a través del sifón. Además, el movimiento de este embudo les permite cambiar de dirección durante la natación.

Algunos cefalópodos, los que viven en zonas litorales, han desarrollado mecanismos para generar cambios de coloración en su superficie, formar manchas, bandas… y con ello poder transmitir mensajes como señales de peligro o de cortejo, o para mimetizarse con el medio.

Para lograr los cambios de coloración, cuentan en su piel con células cargadas de pigmentos (cromatóforos), rodeadas de células musculares con las que estiran o contraen a las primeras. Imagine un globo tranparente lleno de café, al estirarlo o contraerlo la concentración de pigmentos cambia y con ello la coloración que presenta, pues los cromatóforos de los cefalópodos actúan igual.

Y si mimetizarse con el medio no fuera suficiente, la mayoría de los cefalópodos cuentan con una glándula de la tinta, con la que producen un líquido mucoso oscuro cargado de melanina y otras sustancias que expulsan cuando son alarmados. Al expulsarla confunde los órganos de detección química y visual de los enemigos, con lo que ganan segundos valiosos para poder huir de sus enemigos. Es algo así como las bombas de humo que usan los ninjas de las películas, pero en el agua.

Tienen sexos separados, es decir, hay machos y hembras. Para reproducirse, los machos producen paquetes de espermatozoides llamados espermatóforos que cogen ellos mismos con uno de sus brazos, concretamente un brazo modificado que se llama hectocotilo, sacan el espermatóforo de su cavidad del manto, y lo introducen en la cavidad del manto de las hembras. Cuando los huevos abandonan el oviducto se encuentran con el espermatóforo y son fecundados.

Pero si algo me llama la atención de los cefalópodos son sus ojos, y es que los ojos de estos animales, aunque tienen un origen evolutivo y embrionario distinto a los ojos de los vertebrados. Sus ojos cuentan con una estructura muy similar a los nuestros, con cristalino, esclerótica, retina y humor acuoso. No obstante, hay detalles de la estructura de los ojos que está mejor en los suyos que en los nuestros

Los nervios que contactan con las células receptoras de la retina se sitúan en el caso de los cefalópodos tras la retina, mientras que en nuestro caso tenemos todo un cableado de nervios por encima encima de las células fotosensibles, cableado que para poder sacarlo fuera del ojo atraviesa la retina en un punto, dejando una zona de nuestra retina con un punto ciego, una chapuza que no tienen los cefalópodos.

¿No me cree con lo del punto ciego? Dibuje en un trozo de papel dos puntos separados por unos 4 dedos, ponga el papel aproximadamente a un palmo de su cara, cierre su ojo derecho y centre su vista en el punto de la izquierda, acerque y aleje el folio y verá como el punto desaparece.

Eso sí, estos animales solo cuentan con un pigmento en sus células fotosensibles, por lo que interpretan el mundo en un único color, pero tampoco es que les haga mucha falta, y menos mientras más profundo vivan.

Fuentes:
Hickman, Roberts y Larson, 2001. Zoología, 10ª Edición. McGraw Hill
http://es.wikipedia.org/wiki/Ojo_de_los_cefal%C3%B3podos
http://es.wikipedia.org/wiki/Tinta_de_cefal%C3%B3podo

 

sábado, 14 de julio de 2012

¿Corte de digestión o hidrocución?



El tiempo parece más lento cuando esperas, incluso eterno si esperas bañarte en la playa tras el almuerzo. Desde pequeños nos han dicho que para evitar morirnos de un corte de digestión debemos esperar a terminar de digerir el alimento antes de bañarnos, o por lo menos a mi me lo decían.

Pero la digestión es el proceso por el que se transforma el alimento ingerido en sustancias más sencillas para así ser absorbidas. Por tanto, un corte de digestión únicamente implica que dejamos de digerir algo que se encuentra en dicho proceso, lo que puede terminar de dos formas:
  • La digestión se reactiva posteriormente con algunas molestias, como son la acidez y el reflujo.
  • El alimento no continua la digestión y es expulsado del estomago, vamos, que se vomita.
¿Dónde entra la muerte en esta historia? ¿Cómo voy a perder mi partida contra la entropía por darme un baño tras comer?

Lo que ocurre es que lo que temen nuestras madres, no es un corte de digestión, es una hidrocución, pero generalmente no conocen este nombre.

El ser humano, como el resto de los mamíferos, cuenta con reflejo de inmersión, que se activa cuando el rostro entra en contacto con agua fría, y le permite aguantar más tiempo bajo el agua.

Este reflejo consiste básicamente en una reducción del ritmo cardiaco (bradicardia) y una vasoconstricción periférica. Efectos que consiguen reducir el oxigeno sanguíneo que va a ser consumido por los músculos (los cuales ya utilizarán el que está almacenado en la mioglobina), reservando ese oxígeno principalmente para el cerebro y el corazón. Además al contraerse los vasos sanguíneos de la piel se reduce la perdida de calor corporal al agua.

El problema radica en que el reflejo de inmersión es más acusado mientras mayor sea la diferencia entre la temperatura corporal y la del agua, y en algunos casos puede llegar a provocar arritmias que acaben en una parada cardíaca. Y como las paradas cardiacas implican que deja de bombearse sangre, el cerebro se queda sin oxígeno.

La pérdida súbita de conocimiento o muerta directa al sumergirse en el agua es lo que se conoce como síndrome de hidrocución.

De este modo, cualquier motivo que aumente la temperatura de nuestro cuerpo, como hacer ejercicio físico intenso o exponerse al sol como lagartos para coger un precioso bronceado y puede que un cáncer de piel, puede volver peligroso entrar rápidamente en el agua fría.

¿Y que relación tiene esto con la digestión? Pues resulta que durante la digestión, el estómago realiza un trabajo considerable, por lo que requiere mucho oxigeno. Para obtenerlo se dilatan los vasos sanguíneos del aparato digestivo, lo que provoca que al cerebro le llegue menos sangre (lo que explica ese sueñecillo que entra tras las comidas copiosas). De este modo, estar realizando la digestión puede propiciar la hidrocución en el caso de que se produzca el reflejo de inmersión.

Por todo esto, he de recomendar que a la hora de darse un baño, siempre trate de reducir la diferencia de temperatura entre su cuerpo y el agua antes de sumergirse, entrando lentamente al agua, y refrescándose un rato antes en la orilla, independientemente de si acaba de comer o no.

jueves, 12 de julio de 2012

La gata calicó



Podría apostarme con usted que el minino de la foto es una hembra, difícilmente me equivocaría porque solo 1 de cada 3000 gatos tricolores son machos.

Y es que para tener esa configuración de colores, llamada calicó (pelaje blanco con manchas marrón-anaranjado y negras), se requiere que se den una serie de circunstancias genéticas…

Las hembras tienen dos cromosomas X en todas sus células somáticas, a diferencia de los machos, que tienen un cromosoma X y un cromosoma Y.

El gen que determina la expresión o no del color naranja se ubica únicamente en el cromosoma X, y cuenta con dos alelos:
  • Alelo “O” (dominante) determina la expresión del color de pelaje naranja.
  • Alelo “o” (recesivo) determina que el pelaje no sea naranja, permitiendo la expresión de la pigmentación negra, cuya intensidad depende de otros genes presentes en cromosomas distintos al X que no voy a entrar a explicar.
Como los machos son XY, y este gen aparece solo en el cromosoma X, es obvio que un macho solo puede portar uno de los dos alelos, de modo que o presentará el color naranja o el negro, pero nunca podrá presentar ambos.

Pero los alelos O y o cuentan con dominancia de uno sobre otro, ¿Cómo es posible que en una hembra heterocigótica se expresen ambos?

Durante el periodo embrionario uno de los dos cromosomas X de cada célula en las hembras es inactivado de forma azarosa, generando lo que se conoce como el corpúsculo de Barr. Este cromosoma que se inactiva permanece inactivo a lo largo de toda la descendencia de esa célula, lo que explica la presencia de parches en el pelaje en las hembras heterocigóticas, cada parche naranja proviene de una o varias células que inactivaron el cromosoma X que contenía el alelo “o”, mientras que los parches negros provienen de las células que inactivaron el cromosoma X que contenía el alelo “O”.

Por su parte, las manchas blancas están causadas por otro gen presente en otro cromosoma distinto. Este gen cuenta con dos alelos, “S” y “s”, donde el alelo “S” (dominante) determina la presencia de manchas blancas en el pelaje, mientras que el alelo “s” (recesivo) determina la ausencia de manchas blancas.

Pero he comentado al principio que existe una pequeña posibilidad de que un macho sea tricolor, esto puede tener distintas explicaciones:
  • Genéticamente es una gata calicó, con sus cromosomas XX. Pero aunque no tiene el cromosoma Y problemas hormonales durante el desarrollo fetal pueden provocar que se produzca un macho.
  • Cuenta con una trisomía del tipo XXY, de modo que es macho porque tiene cromosoma Y, y al tener dos cromosomas X puede ser calicó.
  • Genéticamente y fenotípicamente es un macho naranja, y mutaciones puntuales sobre este gen provocan la inexpresión del gen naranja en las células mutadas y las descendientes de estas células, dando parches negros aunque no fuera lo esperable en base a su genotipo inicial.
 P.D.: Si te interesan los gatos y todo lo que tiene que ver con ellos no te pierdas Cat obsession.

sábado, 7 de julio de 2012

La cotorra argentina, una invasora.



Recientemente ha anidado cerca de mi casa un grupo de cotorras argentinas, Myiopsitta monachus, unos loros de unos 30 cm de largo y unos 130g de peso, caracterizadas por su plumaje verde claro con leves tintes azules en las alas y grisáceos en el pecho. Miedo me da, porque esta especie suele hacer nidos grupales, con puestas de 5 a 8 huevos por nidada por pareja, llegando a producir más de 30 polluelos por nido, y son muy gritonas.

Esta especie fue introducida en Europa como mascota, pero la liberación de ejemplares, ya sea de forma accidental o intencionada, ha propiciado que se expandan por muchas ciudades, parques, jardines. Como cuentan con una dieta muy variada, y se adaptan bien a distintas condiciones ambientales, son capaces de establecerse sin mucha dificultad en muy diversos lugares.

El problema radica en que al establecerse en un lugar nuevo, afecta a las poblaciones autóctonas, suponiendo una grave amenaza para las mismas.

Debemos tener en cuenta que los ecosistemas son sistemas formados por un conjunto de seres vivos (biocenosis) que se relacionan entre sí y con un medio (biotopo). En condiciones naturales, las relaciones entre esos seres vivos son estables e interdependientes, de manera que aquello que afecte a uno de los miembros del ecosistema puede afectar al resto.

Así, el ingreso de estas cotorras en un nuevo ecosistema, al igual que ocurre cuando se introduce cualquier otra especie invasora en un ecosistema, provoca la pérdida del equilibrio de este, viéndose afectado la composición, la estructura o los procesos de interacción de los mismos, lo que pone en peligro la diversidad biológica.

En este ejemplo, el de la cotorra argentina, su establecimiento en España está provocando el desplazamiento de otras especies aviares como el mirlo, Turdus merula, y la urraca, Pica pica.


Veamos algunos otros tristes ejemplos de especies invasoras:
  • La llegada del picudo rojo a España, como ya comenté, se debe al comercio internacional de palmeras sin un debido control fitosanitario, podemos considerarla por tanto en una introducción accidental de una especie invasora que actualmente se ha convertido en una plaga que se extiende destruyendo varias especies de monocotiledoneas a su paso.
  • También he hablado en el blog sobre el caso del síndrome de colapso de las colonias de abejas, lo que no comenté es que fue el ser humano el que en su empeño de extender el uso de la abeja doméstica, Apis mellifera, la introdujo conscientemente en regiones donde entró en contacto con otra especie de abeja, Apis cerana, que habitualmente es atacada por un microsporidio, Nosema ceranae. De este modo, el parásito encontró un nuevo hospedador mucho peor preparado para defenderse ante él.
  • Las tortugas de florida, Trachemys scripta elegans, muy utilizada como mascota y liberada frecuentemente por sus dueños cuando crecen, ha supuesto un grave daño a los ecosistemas españoles, afectando duramente a las poblaciones de galápago leproso, Mauremys leprosa, y la tortuga mora, Testudo graeca.
  • Recientemente ha muerto el último espécimen de Chelonoidis Abingdoni, quizás por este nombre no les suene, pero estas son las tortugas gigantes que dan nombre al archipiélago de las Galápagos. Las responsables de esta extinción son principalmente las cabras, introducidas por el hombre en esta isla, que al ser mucho más ágil y versátil que las tortugas, ha conseguido desplazarlas de sus sitios de alimentación.

martes, 3 de julio de 2012

Un hombre más poderoso que el monstruo de Laplace



Recientemente fui con unas amistades a un restaurante chipriota, allí, tras la cena, el dueño del local nos leyó los posos del café. El amigo que nos arrastró hasta este lugar afirma no creer en estas cosas, pero que no obstante sentía mucha curiosidad por lo que pudiera decirle aquel hombre.

La cafeomancia es el supuesto arte para predecir pasado, presente y futuro a partir de los símbolos que dejan los posos del café en una taza. El problema comienza, al igual que en otras supuestas artes para predecir el futuro, como la astrología o el tarot, en que para que se pueda leer el futuro este debería estar previamente escrito, es decir, tendría que existir un destino para cada uno de nosotros al que siempre llegaremos independientemente de las decisiones que tomemos a lo largo de nuestra vida.

La doctrina determinista es la corriente de pensamiento que sostiene que el destino es como una cadena irrompible, donde no existen sucesos azarosos, ni tampoco el libre albedrio (aunque el hombre crea tener capacidad de decidir, esto no sería más que una mera ilusión).

Laplace, un brillante astrónomo, matemático y físico, fue un firme defensor del determinismo causal. Este hombre decía que todos los fenómenos de la naturaleza, incluso las acciones humanas, ocurren como el único resultado físicamente posible de sus condiciones previas, siempre conforme a las leyes físicas universales, y por tanto podrían predecirse a partir de ellas si tuviéramos todos los datos necesarios.

Para poder comprender su idea, Laplace instaba a imaginar un demonio que conociese la posición y velocidad de todas las partículas del Universo en un momento dado, y que fuera capaz de resolver con ellas las ecuaciones de Newton aplicadas a todo el Universo. Como resultado, este demonio conocería con total exactitud el comportamiento de todo sistema integrado en el Universo en cualquier momento del futuro, así como del pasado.

Llegados a este punto, si aceptamos esta corriente filosófica, y que una persona pueda leer nuestro futuro usando la cafeomancia, debemos reconocerle un poder elevadísimo, siendo capaz de conocer detalles del futuro a partir de una cantidad desorbitadamente menor de datos que las que requeriría el demonio de Laplace para establecer esa misma predicción.

Cierto es que las predicciones a través de la cafeomancia son también desorbitadamente más vagas que las que establecería el monstruo de Laplace, como por ejemplo, con solo mirar los posos del café predijo a mi amigo que una persona que él conoce va a quedarse preñada en los próximos 6 meses, sin especificar quien, quizás una hermana o quizás la vendedora de la panadería de la esquina. Pero… ¿cuántas variables tendría que haber tenido en cuenta el demonio de Laplace para poder hacer esa aseveración?

Si solo con ver posos en una taza puede hacer tales predicciones, ¿qué podría llegar a predecir con tan solo conocer la mitad de las posiciones y velocidades de todas las partículas del Universo? ¿Estamos entonces ante una persona más poderosa que el monstruo de Laplace?

Claro, todo esto se va al garete si tenemos en cuenta que la Mecánica Cuántica admite la existencia del azar, y la teoría del caos implica que un pequeño cambio azaroso podría producir grandes variaciones en el comportamiento esperado en un futuro, de modo, que aunque no existiese el libre albedrio, y aún más si existe, el futuro no puede estar determinado.

Entonces cómo es posible que alguien pueda predecir un futuro que en realidad no está escrito… pues básicamente por las siguientes razones:

1º La gente que acude a que le lean el futuro piensa que realmente pueden revelarle su futuro, por lo que serán menos críticos con aquello que le puedan decir.

2º Las predicciones realizadas suelen ser muy inexactas, pudiendo estar abiertas a distintas interpretaciones, lo que permite que la gente encuentre conexiones donde no las hay, especialmente aquellos que son menos escépticos a estos artes.

3º La memoria es selectiva, de modo que nos acordaremos principalmente de aquello que nos llame la atención, que suelen ser aquellas predicciones que pensamos que puedan ser acertadas.

Nuestro adivino particular, además de la vaga predicción del embarazo, que le pareció muy acertada a quien nos llevó al chipriota, realizó otras predicciones sorprendentes como:
  • Predecirle a una persona que iba a trabajar con niños, siendo profesora de una especialidad como matemáticas. Posiblemente la que más se acercó, pues la chica es pedagoga.
  • Decirle a una chica que le queda un examen por hacer, predicción vista como muy acertada por esta chica, pues se ha quedado con las ganas de hacer oposiciones a profesorado en Andalucía, no obstante, podemos considerar, visto desde fuera, que la predicción es bastante vaga, el 90% de las personas que conozco de mi edad están pendientes de hacer algún examen, ya sea de la carrera, de un curso, el carnet de conducir, el inglés… sin contar que si esta chica hubiera tenido una entrevista de trabajo al día siguiente seguro que hubiera entendido que lo del examen iba por lo de la  entrevista.
  • Decir a una chica soltera que esa misma noche se pelearía con su pareja, algo que por razones obvias no pudo llegar a cumplirse.
A mí me dijo que soy complejo, que voy por el buen camino por la senda que he tomado, y que actualmente hay una mujer loca por mis huesos. Ciertamente mucha gente piensa que soy complejo, pero otras muchas piensan que no soy nada complejo, así que no sabría que decir sobre esta predicción. Sobre la senda tomada… es una predicción muy vaga, no concretó si se refiere al terreno laboral u otro, desde luego, si se refiere al terreno laboral no parece muy acertado, pues si lo fuera yo no tendría tiempo para escribir dos entradas semanales para este blog. Y con respecto a lo de la mujer loca por mis huesos… desde que se realizó la predicción no he tenido noticias de ella, desde aquí ruego que si alguna lectora se siente identificada, estando loca por mis huesos, se ponga en contacto conmigo, si esto se cumple quizás acepte como buenas las predicciones de este adivino, y lo proponga al desafío de James Randi, por el cual se ofrece un millón de dólares a aquella persona que demuestre capacidades paranormales, desafío que no ha sido nunca superado.